Ir al contenido principal

OIR EL MAR Microcuento

 



Las nubes tormentosas acechaban desde el cierre relámpago entre el horizonte y el mar.  OLAS de más de un metro sacudían con su eterna CANCIÓN el reguero de espuma que la LUNA embelesada pintaba en su andar.  La barcaza a los tumbos daba MIEDO al rechinar.  El mástil  tiritaba creando SOMBRAS sin  cesar. De pronto nos sacudimos y el motor dejó de andar. Mi compañero dormido fue a caer al mar y yo entrado en copas no paraba de roncar. Mi madre me gritó esa mañana que era la ÚLTIMA vez que me vendría a despertar.  Bajo el cobertor de plumas me pareció oír el mar. 
L.F.Del Signore 
Todos los derechos reservados 

Comentarios

Entradas más populares de este blog

COCÓ Y SUS AMIGOS Infantil

Cocó y sus amigos         H abía una vez  un bosque encantado, donde vivía un pequeño conejito llamado Cocó.  Él era  muy curioso y siempre estaba buscando aventuras emocionantes.  Cocó, el conejito. Ilustración Belén Santillan. Diseño gráfico  Magalí Córdoba.     Un día, mientras exploraba cerca de un arroyo, encontró un objeto llamativo entre las rocas, lo tomó entre sus patitas delanteras y lo observó con atención.  ¡Era una llave dorada! Brillante y hermosa por lo cual la guardó. Cocó no sabía cuál puerta abriría esa llave, pero decidió descubrirlo.      Siguió andando por la orilla  del  arroyo y luego de un rato llegó a un misterioso árbol con una cerradura.  Con emoción, Cocó insertó la llave y con un giro, la puerta se abrió. Árbol con puerta secreta para abrir con la llave mágica.   Autor Felipe   3 años. App Draw Magic  Dentro del árbol, el conejito encontró un mundo mágico lleno de criaturas

EL PEZ AZUL Y LA LOMBRIZ Infantil

Había una vez un pez azul llamado Pedro que vivía en el mar. Inquieto y audaz, Pedro no se cansaba de jugar carreras con los otros peces. Un día, mientras nadaba, vio a una lombriz de  tierra llamada Lola, ella había sido arrastrada  al mar por una fuerte lluvia. La pobre Lola   estaba muy asustada y no sabía cómo  regresar a tierra firme. Pedro, con su colorido y llamativo tono azul, se acercó amigablemente a Lola y le ofreció ayuda. Le explicó que no podía vivir en el agua, pero que él la ayudaría a encontrar el camino de regreso a casa. Así comenzó una hermosa amistad. Pedro nadaba junto a Lola, mostrándole las diferentes corrientes del mar y cuáles eran las rutas para acercarse a la costa. Mientras lo hacían, compartían historias sobre sus respectivos mundos. Pedro le hablaba de los tesoros ocultos en el mar, y Lola le contaba sobre la tierra, los jardines y las lluvias refrescantes. Finalmente, después de un corto viaje, Pedro y Lola encontraron una playa tranquila. Lola se desliz

Vida Urbana

 Imagen Periódico Zócalo  Este Poema  participó del III Mundial de Escritura.  Se utilizó el ruido como disparador creativo.  Dormirme entre el ruido de bocinas. Cabeceando en silencio palabras caídas.  Abrir  la ventana, rechina enojada. Peleando al descanso, soñando por nada. No puedo creerme cerrando la mente. No quiero el susurro de tus mentiras. Sacudo  al viento  la Ilusión  demente.                                                                                Buscaré el ruido de hechos perdidos.                                                                               Suenan las llantas, entre hierros rotos.                                                                               Pierdo la vida queriendo escucharte.                                                                                                          L.F. Del Signore                                                                                    Todos los derechos reservados